A aquella hora el ágora
estaba casi vacía, amanecía pero el Sol todavía no había salido,
refrescaba un poco, pero el aire estaba perfumado de los campos. Poco
a poco fueron llegando los amigos de María y poco después lo hizo
ella.
María. - Shalom, amigos
míos.
Amigos de María. -
Shalom, María.
María. -Hoy he pensado
hablaros de cuatro mujeres, de Lía y Raquel y de sus esclavas
respectivas Zilpa y Bilha, madres de los hijos de Jacob, así que
para que valláis pronto a vuestros trabajos, empezare ahora mismo,
pero antes quiero preguntarte a ti Timoteo ¿Como está Yago?
Timoteo. -María, Yago
está bien pese a todos los inconvenientes y las presiones que caen
sobre su persona, para darle aliento ayer ha recibido la visita de su
hermano Juan y María la madre de Jesús y ha tenido una gran
alegría, me han preguntado por ti y te mandan un saludo.
María. -Gracias, tengo
muchas ganas de verlos y de recordar con ellos a Jesús.
Y sin más dilación María
comenzó su relato.

LIA
ZILPA
RAQUEL
BILHA
Cuando Jacob huyó a la
casa de su tío Labán, casualmente se encontró con su prima Raquel
que iba a abrevar su rebaño, Raquel era hermosa y Jacob quedó
prendado de ella, tenía una esbelta figura y un rostro agraciado.
Labán, su tío, cuando
llegó a su presencia aunque no llevaba nada encima le dijo. -Como
eres mi sobrino tendrás que trabajar gratis para mi. El aceptó pero
le habló de su deseo de pedirle a Raquel como esposa, lo cual fue
aceptado por Labán con una condición, de que trabajaría 7 años
para él.
Jacob trabajó los 7 años
y llegó el momento de la boda, se organizó una fiesta y al final
Labán metió a su hija Lía en el lecho de Jacob, en la mañana
Jacob se enteró del engaño, pero Labán le dijo que allí era
costumbre primero casar a la mayor y que tendría que trabajar otros
7 años para casarse con Raquel.
Lía no era hermosa, pero
era buena y tierna, en su matrimonio Labán le concedió una esclava
llamada Zilpa.
Pasaron los otros 7 años
y por fin se cumplieron los deseos de Jacob y Raquel se convirtió en
su esposa y su padre le otorgó otra esclava llamada Bilha.
Lía sabía que Jacob
amaba Raquel, así que cuando concibió, se sintió feliz y dio a luz
a cuatro hijos seguidos: Rubén, Simeón, Leví y Judá, ella pensaba
que así su marido la amaría.
Raquel tuvo envidia de su
hermana y le propuso a su esposo tomar a Bilha para que concibiera
por ella y así fue, Bilha concibió y parió a Dan y Neftalí.
Lía quería tener mas
hijos y le dijo a Jacob que tomara a Zilpa, y esta concibió y parió
a Gad y Aser.
Y volvió a concebir Lía
y parió a Isacar, Zabulón y una hija Dina.
Entonces Dios se apiadó
de Raquel y esta concibió y parió a José.
Como no os voy a contar la
historia de Jacob solo os diré que él y su tío se separaron y
Jacob se fue a la tierra de su padre Isaac, lleno de riquezas pues
había trabajado mucho, durante mucho tiempo.
Como anécdota diré que
Raquel hurtó los ídolos de Labán y se quedó con ellos.
Raquel volvió a concebir
y parió a Benjamín, pero estaba débil y murió en el parto en
Efracta (Belén)
Y terminó su relato.
Era temprano todavía,
empezaban los mercaderes a montar sus puestos.
Abigail, que estuvo muy
atenta preguntó cuando se reunirían otra vez, a lo que María
contestó.- Mañana a esta misma hora. Asintieron y se fueron.